Banderilleros RAFAEL CUESTA ANTONIO JIMÉNEZ “EL Lili” JAVIER SÁNCHEZ ARAUJO
Alejandro Talavante
Palmas
Silencio
Picadores TULIO SALGUERO MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ
Banderilleros VALENTÍN LUJAN FERNANDO JOSÉ PLAZA JULIO LÓPEZ
Juan Pablo Sánchez
Palmas
Palmas
Picadores JOSÉ CARLOS GONZÁLEZ “Pepillo de Málaga hijo” ANTONIO SAAVEDRA
Banderilleros JOSÉ ALBERTO APONTE “Candelas” JOSÉ IGNACIO RODRÍGUEZ “El Puchi” VÍCTOR CAÑAS
PRESIDENTE: D. JULIO MARTÍNEZ MORENO ASESOR: D. PEDRO HERRANZ MARTÍN DELEGADO GUBERNATIVO: D. GONZALO DE VILLA PARRO VETERINARIOS: D. CRUZ MANUEL CARPINTERO HERVÁS, D. FRANCISCO JAVIER FERNÁNDEZ GÓMEZ y D. FERNANDO JAVIER MORALES FERNÁNDEZ
Tarde bonita
para confirmar pensaba Juan Pablo Sánchez. Morante de padrino, Talavante de
testigo y la plaza llena. Y llegaron los Juan Pedro, con la lengua fuera desde
que nacieran, aburridos, sosos , descastados, convirtiendo el evento en una corrida
infumable y bobalicona. Por cada bostezo una pipa… y me comí una bolsa de las
grandes. Que sed. Sedienta de ver toros
y arte acudió la afición a Las Ventas y se encontró con un esbozo de las dos
cosas, o mejor dicho, una caricatura de toros y alguna gotita de arte. El que
sirvió para confirmar no acabó de definirse en el capote. En el caballo metió
un pitón solo y sin bravura. Hubo en banderillas un par decente de Víctor Cañas.
En el primer muletazo ya perdió las manos. Ni ritmo, ni clase, cabeceando al
final, mal empezaba esto. Sin opción de ningún tipo lo mató de una gran estocada.
Mal toro. Llegó Morante.
Suspiro en los tendidos. Algún murmullo. ¿Será hoy? . Sale Un cinqueño castaño,
bajo, bien hecho, con cara, que no acaba de humillar en el capote. La fuerza
justita, apenas se le pica. Lo llevan entre algodones y lo sujetan con pinzas.
Unos doblones por abajo, poco más y el de la Puebla si no lo ve, no lo intenta.
Pincha siete veces y mata de media. Queda otro, prudencia. El de Alejandro es
negro listón. Lo prueba en los medios con el capote. Hay que cuidarlo y se le
hace un análisis de sangre en el caballo. Estatuarios de piedra, sin moverse.
Dos series con la izquierda. Muletazos largos templando la embestida. A este le
vale casi todo. La muleta baja, muy planchada en la siguiente tanda y el toro
pierde las manos. En alguna hay ligazón, toques precisos, improvisación y
cambios de mano con mérito. Pinchó y mató de un estoconazo. Quiso y pudo. Vuelve Morante. ¡A
esta es!, suena en el tendido. Salió andando de chiqueros el negro oponente.
Probaturas en el capote sin lucimiento y saliendo con la cara alta. En el
caballo hizo sonar el estribo pero se le dio. En banderillas esperó sin mucho
peligro. Con la derecha lo llevó a los medios. En la segunda tanda perdió las
manos. En la tercera acariciamos el cielo con algún pase bello a un toro
recuperadito. Y en la cuarta despertó la plaza. En la siguiente con la
izquierda el toro con la cara alta y rebañando. Vuelve a la derecha y nos
regala dos buenos pases y un trincherazo del que sale con torería. Otra vez con
la izquierda, rebrincadito con la cara a media altura, despacio y sin emoción,
el toro se acaba. Una pena, pensaron algunos. Otra vez será. Por cierto, el mismo vestido puede servir, ni
se lo manchó. Pinchazos y descabello. Salió para
Talavante el rey de la romana de esta tarde. Cuanto más grande más soso. Porque
el colorado ojo de perdiz llegó dormido al ruedo. Se frenó en el capote. En el
caballo se deja. Empezó la faena de muleta dando cabezazos al final de la
embestida. No tiene mucho recorrido pero Alejandro lo mete en la muleta
arreglando la embestida durante un par de series. Luego empieza a reponer y
salirse de la suerte embistiendo con sopor. Pinchazos y mata de estocada
trasera. Recibe alegre al sexto
Juan Pablo Sánchez rematando con revolera. La esperanza es lo último que perdió
alguien. Porque, después de una leve pelea al caballo, apareció Morante para desquitarnos
de su mala suerte. Un quite pinturero a la verónica, con temple, “moranteando”,
que convirtió los suspiros en oles. El mexicano, ya con la muleta, se va a los
medios y le impone medicina de temple a la embestida rebrincada. Pero con la
izquierda el toro quier pararse y va a menos, tan a menos que se echa dos veces
y hay que matar. Estocada entera y fin de los juanpedros. Menos mal.
No vi la corrida pero granaino la ha descrito con tanto arte q es como si hubiera estao en las ventas. He leido q lozano reprochó a morante el quite al 6º de la tarde, pq si estaba en su derecho. Con la escasez de quites q existe debido al monopuyacito no faltaba mas q eso lozano.
No vi la corrida pero granaino la ha descrito con tanto arte q es como si hubiera estao en las ventas. He leido q lozano reprochó a morante el quite al 6º de la tarde, pq si estaba en su derecho. Con la escasez de quites q existe debido al monopuyacito no faltaba mas q eso lozano.
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